El 8 de Enero es “el primer día de escuela de 2013”. Esta vuelta a empezar condiciona la
situación de partida del primer proyecto de 2013:
La Maleta Viajera
Es el momento de reencontrarse y volver a
involucrarse en un proyecto que nos guste desde el principio. Es el momento de cortar y confeccionar:
Un traje a nuestra
medida
Queremos asegurarnos un “buen comienzo escolar de
año” y para conseguirlo sabemos que los niños y las niñas tienen que sentir
curiosidad, estar activos y establecer relaciones entre las cosas. Sabemos, también, que esto sólo se consigue
cuando tienen algo interesante en lo que pensar. Así que vamos a pensar, un poco, en “trapos”
y mucho en…
Su mundo
En esta escuela estamos convencidos de que la
autonomía es un principio fundamental en la educación para los primeros años de
la vida. Los niños y las niñas se
encuentran mejor cuando adquieren autonomía. Cuando pueden y quieren hacer cosas
solos y solas, entre otras cosas, cuando
saben vestirse.
Todos los días se visten y se desvisten. Esta familiaridad que tienen en el manejo de
la ropa, resulta muy práctica a la hora de dar un paso más. Y a los tres, a los
cuatro o a los cinco años están preparados y preparadas para darlo. Están creciendo y “quieren crecer”, así que
vamos a estimular (y fomentar) estas “ganas” de independencia.
Seguro que los principios serán” un poco duros” y, quizás,
después de sus primeros intentos, tendremos que echarles una mano y terminar el
trabajo que han empezado (intentando transmitirles la idea de que no es malo
equivocarse). Y otros días, les
animaremos a vestirse “como quieran” y el resultado nos sorprenderá, porque
estaremos en carnaval y, este año en carnaval, daremos:
La vuelta al mundo
con una maleta viajera
llena de trajes a medida.
…Porque cuando el
carnaval viene, cada cual va donde quiere y como quiere.
Nuestra Maleta se ha tenido que abrigar con gorro y bufanda, para acompañar a María y su familia en el maravilloso viaje que han hecho. Juntos han ido a Cofiñal, un pueblito de León, un día de invierno... no hace mucho. Allí María ha visto cumplido uno de sus mayores sueños: jugar en un paisaje totalmente nevado, pero muy que muy nevado.
